Un chiste muy Feminista (para que no se incomoden la feminas)

El caballero conversa con su hija, de cuya madre se había divorciado, y en su rostro reflejaba la animadversión que profesaba a su ex –cónyuge.
-Hoy es un día de dicha para mí porque voy a entregarte el último cheque correspondiente a tu manutención, y no porque me pese destinar dinero para sufragar parte de tus gastos, sino porque ya no tendré que bregar con tu malvada madre; desde ahora en adelante todo lo relacionado con tus necesidades lo resolveremos entre tú y yo. Ah, y quiero que lo que te he dicho se lo repitas a esa bruja sin quitarle ni añadirle nada.
-¿Crees que eso sea necesario, papá?-preguntó la muchacha con expresión compungida en el rostro.
-Claro que lo es, pues estaba loco porque llegaras a los dieciocho años, edad en la que cesan mis obligaciones materiales contigo. Y todo para solamente verle la cara a esa cáscara de mujer cuando nos encontremos por casualidad en algún lugar.
-Se nota que odias a una mujer que estuvo a tu lado, en las buenas y en las malas.
- Ella no vivió conmigo días malos, ya que me conoció siendo ya rico, y al divorciarnos se quedó con una buena tajada de mi plata, bandolera, sinvergüenza, gastadora compulsiva.
-Ahora que la acusas de despilfarradora del dinero, recuerdo que ella me decía que eras tan tacaño que a veces mirabas por encima de los espejuelos para prolongar la duración de los cristales.
-Será mejor que no sigamos hablando de esa cutárfara, para fines de salud mental y emocional. Lo que te voy a pedir encarecidamente es que me describas su reacción al escuchar el mensaje que le envié.
Dos horas mas tarde regresa la joven, y su progenitor, con una sonrisa maligna y sarcástica en los labios, se acerca a ella.
-¿Qué dijo la loca?- preguntó de inmediato.
-Levantando los brazos, y con un suspiro de alivio, gritó que ella se alegraba tanto como tú de mis dieciocho abriles, porque ya podía informarte que no eres mi padre.